El presidente de la República, Nicolás Maduro entregó al presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup el decreto de emergencia económica nacional, afirmando que "espera el apoyo del Parlamento".
"Frente a la situación conocida que se ha abierto en el debate junto al pueblo, estamos obligados a dar un salto sostenido, nacional y entre todos de una economía rentista agotada en fase terminar a una economía productiva generadora de riquezas distribuida igualitaria y justamente. Esa economía decadente, profundizada como un mal por los golpes de la guerra económica (...) El pueblo está esperando respuestas, soluciones, y nadie piense que esas soluciones corresponden a un solo sector. Nos corresponde a todos en un proceso sostenido, de encuentro", dijo.
Explicó que el pueblo no está en contra de las políticas económicas, sino en que no se cumplen y se convierten en falsos positivos.
"Esta es una de las grandes debilidades que tenemos como Gobierno. La gente quiere un Estado fuerte que ponga límites a la especulación y los precios desmedidos. El pueblo está en contra de que tengamos un capitalismo salvaje en las calles. No reclaman por lo que haríamos sino por lo que no hemos hecho".
Enfatizó que "el Gobierno no ha logrado frenar la guerra económica", al tiempo que apuntó que "un importante porcentaje del país está esperando mucho más de nosotros".
"Yo quisiera esperar mucho más de ustedes (oposición). Me gustaría tener confianza de que muchas de las declaraciones que se han dado sean parte de una estrategia para alcanzar una economía productiva (...) Yo llamo a un diálogo constructivo para la acción y la construcción de una nueva economía, para desactivar cualquier mecanismo a la especulación y el acaparamiento. Un diálogo de transparencia para que el capitalismo no se siga tragando al pueblo".
Añadió que la bonanza de los altos precios del barril de petróleo permitió la "inversión en gastos suntuosos de una burguesía parasitaria que no invirtió ni invierte en Venezuela".
"Creo que ha llegado la hora para ir aminorando la dependencia y el atraso, y para darle sustento al modelo social que se ha desarrollado".
Memoria y cuenta 2016 |
Entretanto, aseveró que el espíritu de la emergencia nacional que fue decretada este viernes es de "impulsar un gran movimiento nacional de protección del pueblo, de recuperación económica, de establecimiento de nuevos sistemas de producción y abastecimiento", al tiempo que resaltó que dicho decreto podría extenderse durante todo el 2016. "Esta es una emergencia que estoy seguro va a ocupar todo el 2016, con esfuerzos extraordinarios, acompañando al pueblo y estableciendo mecanismos de distribución para el pueblo. Estoy optimista con los primeros planes que hemos revisado en los últimos días. Esta es la oportunidad para dar el salto, o lo hacemos ahora o no hay más opciones para el daño que pudiera sufrir la nación y no vamos a permitir que ese daño se profundice".
Además, hizo un llamado a la restauración de la confianza, con una gran convocatoria al trabajo, para que sea convertido en acción y resultado.
"Convoquemos a los pequeños, grandes y medianos productores a tener nuevas fuentes de divisas convertibles para nuestro país (...) Venezuela tiene que construir su vocación exportadora para captar las divisas necesarias para el desarrollo interno".
También, hizo especial énfasis en el necesario ajuste de los precios del combustible, que son los más económicos del mundo, producto de un desfase histórico: "Son decisiones complejas, necesarias e ineludibles".
Finalmente, llamó a la unión para la defensa de la economía nacional.