La amenaza de un golpe de Estado en Venezuela sigue vigente, declaró el presidente venezolano, Nicolás Maduro. Además, Maduro afirmó que apoya la iniciativa de Uruguay y México sobre la regularización de la situación en Venezuela, que apunta a "construir un escenario de entendimiento mutuo". Y añadió que las elecciones presidenciales en Venezuela no se realizarán en un futuro próximo: el problema no está en los comicios, sino en la oposición. El mandatario precisó también que Venezuela está dispuesta a hacer inviable militar y humanamente una invasión de EEUU.
"¿Cómo se evita una guerra? Con la diplomacia de paz y la opinión pública mundial. También prepararnos para hacer impagable desde el punto de vista de costos militares y humanos una invasión por parte de EEUU", dijo. Maduro afirmó ser presidente constitucional y calificó de "marioneta de EEUU" a Guaidó. EEUU y otros países anunciaron que reconocen a Guaidó y exigieron que Maduro, cuya elección al puesto de jefe de Estado califican como ilegítima, no recurra al uso de la fuerza contra la oposición. Rusia, China y otros Estados expresaron su apoyo a Nicolás Maduro como presidente legítimo de Venezuela, una fuente de Sputnik en Bruselas informó el 4 de febrero que Italia bloqueó la declaración de la Unión Europea sobre el reconocimiento de Guaido como presidente interino de Venezuela.